Cada año se producen en España cerca de 30.000 paradas cardíacas fuera del ámbito hospitalario. Saber realizar correctamente las maniobras de RCP y tener acceso a un desfibrilador externo automático (DEA) en el entorno puede marcar la diferencia entre la vida y la muerte. Alsa se convirtió en 2015 en la primera empresa del sector de la movilidad en nuestro país en instalar desfibriladores en los autobuses que opera, en colaboración con la empresa especializada Almas Industries. El compromiso de Alsa como empresa cardiosegura que ha reconocido la FEC se ha traducido en que ha pasado de tener 21 desfibriladores en el año 2015 a 151 desfibriladores instalados en autobuses, estaciones de autobuses y centros de trabajo en junio de 2023.