Isabel Pantoja volvío a Madrid para darse un baño de masasy con el Wizink puesto en pie. Arropada por una maravillosa orquesta y casi diez mil espectadores, la artista deslumbraba en una noche inolvidable y cargada de emociones, con el recuerdo de su madre, y en la que cantó sus míticos temas como Hoy quiero confesar, Pensando en ti, Se me enamora el alma, o Así fue. El momento más divertido de la noche fue cuando la cantante subió al escenario a Naiara de Operación Triunfo para cantar juntas Garlochí y posteriormente, Isabel llamó a su sobrina Anabel para que enseñara los pasos a todos los presentes. Las tres se pusieron a bailar como si fuera una coreografía de TikTok. Un vídeo que se ha hecho viral y que ya inunda las redes con miles de versiones