El sobrecoste que tuvo la ampliación de Nicolás Soria, unas obras esperadas desde 1998

La culminación de una de las obras más demandadas en Oviedo desde finales del siglo XX ha obligado al Estado a rascarse el bolsillo bastante por encima de lo previsto. La Delegación de Gobierno acaba de cifrar en 4,6 millones de euros la inversión realizada por el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) para finalizar, al fin, la ampliación del paso bajo las vías de la calle Nicolás Soria. La cantidad supone un 54% más de los 2,99 millones en los que la actuación fue adjudicada, en octubre de 2019. A pesar de este sobrecoste y multiplicar por cuatro el plazo de ejecución inicial de doce meses, los vecinos de Ciudad Naranco se muestran satisfechos por el resultado. "Se ha ganado mucha fluidez para el tráfico y por fin tenemos unas aceras decentes", asegura el colectivo Ciudad Naranco Existe.

Corría el año 1998 cuando el entonces Ministerio de Fomento, dirigido por el asturiano Francisco Álvarez-Cascos, comprometió por primera vez la transformación del principal acceso al populoso barrio ovetense como medida para acabar con los atascos en esta parte de la ciudad. Desde entonces, la promesa de convertir en realidad esta mejora fue entrando y saliendo de los programas y repertorios de promesas de los distintos ejecutivos estatales. Una vieja aspiración que, a falta de inauguración oficial, el gobierno de Pedro Sánchez da por satisfecha. "Adif está a punto de finalizar la obra del desdoblamiento de la calle Nicolás Soria, en Oviedo. Una inversión de 4,6 millones de euros que permite descongestionar el tráfico en la zona", publicó en sus redes la delegación del Gobierno.

Esta escueta comunicación realizada por el equipo de la Delegada del Gobierno en Asturias, Delia Losa, supone oficiosamente la culminación de unos trabajos que oficialmente arrancaron hace cuatro años y medio. Fue a mediados de octubre de 2019 cuando Adif adjudicó la obra para construir dos carriles más de acceso a Ciudad Naranco. El organismo estatal encargó los trabajos a la empresa Copcisa con un presupuesto de 2,9 millones y la previsión de rematar las obras en un año. Sin embargo, la realidad fue muy distinta.

Las complicaciones técnicas, unidas al impacto de la pandemia del coronavirus provocó que se encadenaran varios retrasos. En junio de 2021, los trabajos fueron paralizados a raíz de unos problemas de cimentación. Más de un año después, previa redacción de un nuevo proyecto, las máquinas volvieron a dejarse ver, pero no sería hasta finales del pasado verano cuando los trabajos comenzaron a experimentar grandes avances.

Desde hace un par de semanas, los cinco carriles funcionan a pleno rendimiento. A día de hoy, la urbanización de la zona está prácticamente rematada, para satisfacción vecinal. "Se nota bastante que ya no hay ni un atasco. Se sale con mucha fluidez del barrio", indica el presidente de Ciudad Naranco Existe, Rubén Fernández, asegurando que el impacto positivo de la obra alcanza igualmente a los viandantes. "También se nota en el tráfico peatonal. Las aceras son ya decentes y por lo menos te puedes cruzar con la gente", afirma el representante vecinal, asegurando que la estrechez de las antiguas aceras suponía un problema para los desplazamientos a pie. "A los peatones les costaba cruzarse", puntualiza el vecino, entusiasmado por ver como décadas de movilizaciones terminan por dar sus frutos en el barrio.

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