El "superjuzgado" habilitado en Oviedo especialmente para resolver las demandas de cláusulas suelo hipotecarias está al borde de la saturación. En mes y medio de funcionamiento acumula 722 casos y en septiembre se espera que supere la barrera de los 900, lo que obligará a incrementar la plantilla del personal que se encarga de recepcionar y tramitar estos pleitos. Fuentes judiciales aseguraron que el Principado ya está al tanto de que va a ser necesario orientar a trabajadores a estas funciones para tratar de dar salida a los expedientes que se comienza a acumular en las mesas.
La cifra de 900 demandas es clave porque es la que el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) considera que es la límite para que un Juzgado de los de primera instancia llegue a la saturación en un año de actividad. El "superjuzgado" asturiano, que comenzó a funcionar el 1 de junio, alcanzará ese número en poco más de dos meses. Y eso que los dos magistrados, según señalaron fuentes judiciales, están dando salida a los casos con celeridad. De hecho, ésa fue una de las razones por las que se decidió especializar a ese Juzgado, el de instrucción número 6 de Oviedo que dirige el magistrado Antonio Lorenzo Álvarez, hacia estos casos relacionados con cláusulas suelo y otro tipo de pleitos ligados con la banca. A finales de junio se incorporó, además, una jueza de refuerzo con formación en este tipo de pleitos, para dar más velocidad a las audiencias y fallos.
El ritmo de audiencias
Las expectativas son que el Juzgado pueda atender un mínimo de 45 audiencias a la semana a partir del mes de septiembre. Fuentes del Poder Judicial apuntaron esta semana que "el Juzgado ha recibido en mes y medio casi el cuádruple de las causas que antes recibía en todo el año, aunque hay que destacar la rapidez con la que está tramitando las demandas por cláusulas suelo, vencimiento anticipado, intereses moratorios, gastos de formalización de hipotecas o hipotecas multidivisa, siendo uno de los Juzgados de España que más sentencias ha notificado ya". En concreto, hasta el 20 de julio había dictado 12 fallos, todos ellos a favor de los demandantes y en contra de la banca.
